Episodio 46 - Contra los plastas

Podium

En esta vida se puede ser cualquier cosa menos un plasta, y si usted ha decidido ser uno, tendrá que admitir que poco a poco vaya formándose un círculo de vacío a su alrededor para que pueda ser un plasta feliz, pero a solas. Así que hemos decidido clasificar a los plastas, detectarlos y eliminarlos de nuestra vida o, al menos, mandarlos a ser plastas al único lugar donde están moral y legalmente legitimados para ello: en su casa.

Más episodios

Episodio 50 - A favor del verano

En este episodio epistolar celebramos el final de la quinta temporada de Arsénico Caviar y el principio del verano recordando algunas de nuestras mejores postales veraniegas: cuando estuvimos una semana sin hacer nada en un todo incluido de Lanzarote, cuando nos emborrachamos en Nápoles, cuando vomitamos en Sicilia o cuando nos cruzamos en una cafetería de Los Ángeles con James Franco antes de que lo cancelasen por aquello de ******** ******. ¡Viva el verano!

Episodio 49 - Contra los libros

Todo está en los libros, dicen. Podrías no salir nunca de una biblioteca y descubrir más sobre el mundo que yéndote a Japón. Los libros, para las personas solitarias como nosotros, han servido históricamente como guía y también como refugio. Y escribir, casi como bálsamo.Por otro lado... no todo está en los libros. Hay libros que son una basura, escritores a los que les deberían revocar la licencia, influencers que hacen cosplay de la lectura, la escritura y la literatura y, en general, gente que se ha puesto a leer para contarlo en Instagram y ver si así por fin folla. Este programa está dedicado a todos ellos.

Episodio 48 - Contra planchar

No nos gusta planchar, pero nos gusta que esté bien visto ir planchado. En este episodio nos metemos de lleno en ese fascinante mundo de la norma social, la pompa y el protocolo. En lo necesarias que son las normas, aunque sea para romperlas, y en lo útil que resulta que haya ciertas guías que te digan cómo comportarte en la mesa, en un cóctel o en una redada. Aunque luego, como siempre, acabemos haciendo todo lo contrario de lo que deberíamos.