Episodio 51 - Contra septiembre

Podium

Sabemos que es octubre, pero es que septiembre no es un mes, sino un estado mental. Septiembre significa volver y no parar. Significa tiempo de urgencias, de propósitos, de cambios y de responder a todos esos "a ver si nos vemos pronto". En Arsénico Caviar estamos profundamente en contra de llevar una vida acelerada llena de planes que no quieres hacer y de gente a la que no quieres ver y, pese a todo, esta temporada regresamos optimistas, tranquilos y más sobrios que nunca. Os prometemos que esto no será como nuestra infame temporada cinco.

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Episodio 58 - Contra los buenos

En Arsénico Caviar estamos constantemente al límite de nuestra propia contradicción por culpa del neoliberalismo y el patriarcado, pero una cosa sí que la tenemos clara: odiamos a los buenos. No odiamos la bondad, ojo, sino a ese tipo de persona que siempre se posiciona en un plano moral superior, que dicta y decide cómo debe comportarse (e incluso sentir) el resto de la gente y que te recuerda constantemente lo mal que lo estás haciendo. Porque los buenos, amigos, no son tan buenos y la búsqueda de LA BONDAD pasa, irremediablemente, por asumir que podemos errar, equivocarnos y, en definitiva, ser un poco malos de tanto en tanto. ¿De qué otra manera vamos a aprender?

Episodio 57 - Contra la culpa

Sentirse culpable es una cosa que roza el absurdo. Según nuestra vieja amiga la RAE, la culpa es la “acción u omisión que provoca un sentimiento de responsabilidad por un daño causado”, ¡pero qué tontería! ¿Cuántas veces nos sentimos culpables sin hacer absolutamente nada, sin causar ningún daño, sin realizar ninguna acción? ¿Y cuantisima gente que debería sentirse realmente culpable por sus malos actos duerme cada noche a pierna suelta? Pues eso, la culpa, como el dinero, está mal repartida en este mundo injusto y cruel. Ya no nos sorprende. Por eso reivindicamos librarnos de ese sentimiento tan amargo. Hoy y siempre.

Episodio 56 - Contra el talento

¡El talento! Ese concepto huidizo, misterioso, origen de todo el placer y todo el sufrimiento del mundo. En este episodio nos ponemos las gafas de la presbicia para inventar averiguar por qué unos lo tienen (nosotros, por ejemplo) y otros no y, sobre todo, si sirve de algo por sí mismo si no estás dispuesto a convertirte en un ser humano repugnante y autocomplaciente para demostrarlo al mundo entero. Talentosos sí, pero nunca g*lip*llas.