Tenemos el deber, sin duda, de explicarnos a nosotros mismos qué ha sucedido en Valencia. Pero no hay un solo recurso en la elocuencia que pueda añadir nada sobre las torrenteras abiertas, la tierra rota por las aguas, tanta furia de la geología. Tanta muerte. El dolor nos vence así: arrebatándonos la utilidad y el consuelo de la palabra. Porque todos sabemos que a veces, como estos días en Valencia y en la Mancha, simplemente no hay consuelo.
Joaquín Estefanía reflexiona sobre la repercusión de una victoria de Trump en las elecciones de EE UU y sus consecuencias en la lucha contra el cambio climático.
Cerré mi cuenta en Instagram hará un par de semanas después de que Salvados dedicara un capítulo a contar el funcionamiento interno de Meta en los temas relacionados con la salud mental de jóvenes y adolescentes. No podía seguir en un espacio en el que campan a sus anchas pedófilos y agresores sexuales. Por no hablar del largo historial de cuentas feministas canceladas y del acoso sistemático que sufrimos las mujeres en esta red.
Hoy la prioridad es atender a las víctimas y ayudar a los territorios devastados. Pero hay otra, tan importante como urgente, que es entender de una vez por todas lo que la ciencia lleva años señalando. Que la crisis climática convierte en más frecuentes y virulentos los fenómenos extremos como sequías, tormentas, huracanes o DANA. Y que esto nos obliga a repensarlo todo, al menos en dos direcciones. La primera, adaptándonos de forma urgente a la nueva realidad. La segunda, más de fondo, pero inaplazable, es una aceleración de la transición ecológica.
Soledad Gallego - Díaz reflexiona sobre la responsabilidad de los responsables públicos a la hora de prevenir las tragedias climáticas.
Xavier Vidal - Folch reflexiona sobre las consecuencias tras las inundaciones en Valencia tras el paso de la DANA
Xavier Vidal-Folch reflexiona sobre los últimos compases de la campaña electoral en Estados Unidos
Vamos a vivir sin acostumbrarnos a la palabra desolación mientras sucede la violencia sexual y repetimos palabras como novia, víctima, padre, madre, explicar… y mientras hay quien se dedica a hacer negocio con el mal ajeno. Vamos a vivir mientras los norteamericanos deciden entre Donald Trump y Kamala Harris, Israel continúa su matanza de palestinos y las palabras asilo o irregular se cuelgan en la espalda de las la política europea.
Pero lo hace gracias a las mujeres. Y es que a las organizaciones políticas les cuesta exigir a los suyos comportamientos ejemplares también en su vida privada. Que un presunto agresor sexual no ocupe puestos de responsabilidad cuando se conocen sus prácticas violentas con las mujeres no merece reconocimiento. Lo meritorio está en impedir que quien ya reconoce problemas graves de salud acceda a responsabilidades políticas.
El director de 'El Larguero' analiza así la actitud del club blanco en la gala del Balón de Oro.