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Francesc Miralles, motivador de 'Si amanece', aborda la teoría de 'La Meta' desde distintas ópticas.
El listón estaba alto, pero el fútbol español siempre es capaz de superarse a sí mismo cuando se trata de un escándalo para proteger a los de siempre. La negligente redacción del acta arbitral por parte de Soto Grado abrió la puerta a los comités para suavizar de forma vergonzosa una acción violenta de Mbappé (Kylian para Cuadra Fernández) que perfectamente pudo lesionar a Antonio Blanco. Ya en el campo resulta inexplicable que, estando como estaba bien situado, Soto Grado resolviera el tema con una amarilla. Pero que, en frío, los comités ventilen el asunto con un partido de sanción da ganas de bajar la persiana y dimitir de todo. Si la misma acción violenta la protagonizan Foulquier, Maffeo o Tenaglia, se van a la calle sin duda y además con un acta arbitral redactada para que no vuelvan a jugar hasta la temporada que viene. A Mbappé un poco más y le tiene que pedir perdón Antonio Blanco por no quitar la pierna.